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jueves, 18 de agosto de 2011

Se terminó ¿el sueño?

El final feliz de una larga historia no llegó. México quedó eliminado del mundial sub-20 al caer por marcador de dos goles a cero ante su similar de Brasil, en un gran partido de fútbol. Más allá de la frustración que implica el no llegar a la final y disputar el campeonato, creo que es momento de hacer un ejercicio de valoración, y rescatar los puntos buenos (que son varios) y las enseñanzas que este grupo ha vivido y adquirido.

Por principio de cuentas, creo que anoche la selección dio su mejor partido. La falta de conjunción quedó enterrada por una serie de jugadas colectivas que mostraron trabajo, acoplamiento y un buen entendimiento dentro del campo. Brasil dominó los primeros 15 minutos, pero de ahí en adelante el conjunto verde equilibró el partido, y durante el segundo tiempo fueron quienes tuvieron mayores llegadas a gol. Si acaso, lo único que puedo decir es que estos jóvenes mostraron resquicios de un viejo vicio que nos aqueja y que ellos deben erradicar: el jugar bonito, ser superior al rival, tener mucha llegada pero no poder concretar. La historia de ayer fue la misma que hemos visto innumerables ocasiones y que se sintetiza perfectamente en esa famosa frase: “jugamos como nunca, y perdimos como siempre”.

Ahora, también es de destacar la gran calidad del rival en turno. Sin duda me gustó mucho más esta versión sub-20 carioca que la actual selección mayor; este equipo tiene chavos con una gran calidad técnica, bien trabajados y con una inteligencia y astucia dentro del campo digna de las leyendas que han portado ese uniforme. Aunque fue avasallado por México durante grandes lapsos del cotejo, el conjunto brasileño nunca dejó de dar muestras de su poderío y peligrosidad, al grado que metieron gol cuando más empujaba México. Ojalá respeten los procesos de varios de estos muchachos, puesto que tienen un futuro prometedor para sus clubes, para Brasil y para los seguidores del fútbol internacional de calidad.

Para México la pregunta debería ser: ¿qué sigue? Ojalá salgan el sábado con ánimos renovados y alcancen el tercer lugar, muy digno a todas luces por todo lo que rodeó este proceso: 2 largos años de preparación, giras internacionales, una recta final en la que varios elementos acuden cual bomberos a apagar de emergencia el incendio de la sub-22 en Copa América… Tercer lugar del mundo en su categoría es algo de lo que estos jóvenes futbolistas deben sentirse orgullosos. Y ojalá también sus clubes les den la oportunidad de mostrarse más tiempo en la cancha, porque ya demostraron con creces que calidad tienen, lo único que necesitan ahora es confianza, apoyo e impulso para que sus carreras sigan en ascenso. No habrán coronado esta aventura de la forma que todos hubiéramos querido, pero queda la satisfacción de haberlos visto luchando hasta el final, cayendo con la cara en alto y demostrando que la calidad del futbolista de esta nación está a la altura y para competirle a cualquiera. ¡¡Felicidades chavos!! Para mí ya son campeones.





Supercopa violenta

No tuve la oportunidad de ver el encuentro de vuelta entre el Barcelona y el Real Madrid, por lo que no puedo opinar gran cosa de éste. Lo que sí me llama la atención es que, cuando no creí que algunos elementos del cuadro merengue pudieran caer más bajo, lo hicieron: Marcelo me parece un jugador de gran calidad, pero esa patada que le tiró a Fábregas es criminal, pudo haberlo lesionado gravemente. Entiendo que en los últimos meses el clima se ha enrarecido y se ha viciado por los dimes y diretes, pero dos clubes con la prosapia del Barcelona y el Real Madrid no pueden andar peleando como en el barrio, y tampoco el entrenador puede ir a provocar a rivales.


De pena ajena el piquete de ojos que Mourinho le propinó a un miembro del cuerpo técnico blaugrana, si yo fuera dirigente madridista le hubiere dado las gracias allí mismo y lo hubiera puesto en el primer avión con destino a Lisboa. No se si sea intencional esta tendencia del Madrid a convertirse en el “villano” de la película, en el “odiado” por todos, pero creo que ha caído muy bajo y ha convertido la rivalidad con el FCB en una guerra sucia, de esas en las que “todo se vale”, y cuando las cosas no salen entonces los pretextos desvían la atención. Muy mal por ti, Real Madrid, que permites que unos cuantos manchen la gran historia que hay detrás de ti.



2 apuntes sueltos extra

Hay dos temas que quise tocar desde hace varios días: el primero es extender una felicitación a Ramón Morales por haber terminado una etapa muy importante en su vida. 16 años de una carrera intachable, íntegra, limpia, a gran nivel y con muchos momentos de gran satisfacción. Monterrey, Guadalajara y Estudiantes Tecos fueron sus playeras, así como la de la Selección. 2 mundiales, copa confederaciones, copa de oro, copas América… Se te va a extrañar, Ramoncito -permíteme que te llame así- porque jugadores como tú no surgen todos los días. Si bien la recta final de tu carrera no fue como todos hubiésemos deseado, ojalá que los nuevos proyectos que hay en puerta rindan frutos de la manera que consideres mejor. Seguro sabremos de ti, alguien que le ha dado tanto al fútbol no puede desapegarse de éste así como así. ¡¡Enhorabuena, y mucho éxito en lo que venga!!

Y pasando a otro tema, me pregunto: ¿Qué pasó en Querétaro? Gustavo Matosas ha hecho bien su trabajo con los Gallos, y en la semana cayó como bomba la noticia de que no era más el director técnico de los emplumados. He leído acerca de problemas con jugadores o directivos, cobros por jugar y hasta diferencias con algún promotor; a mí no me gusta ser malpensado y, salvo que fuera por un problema de salud o familiar no aquejara, no entiendo nada. En su lugar llega un histórico como lo es José Saturnino Cardozo, y si es entrenador como fue jugador, los queretanos podrán estar tranquilos. Por el bien de ellos y sobre todo por el de la afición, ojalá se le den las cosas al otrora “Diablo mayor”.


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