Los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León ingresaron al futbol profesional en 1967, justo para el inicio de la temporada 67-68 de la Segunda División. Tras varios fallidos intento por conseguir el ascenso, finalmente lograron el campeonato en la temporada 73-74, tras derrotar a la Universidad de Guadalajara por marcador global de 3-2.
Apenas llevaban un torneo completo en primera división cuando, el 4 octubre de 1975, consiguieron, contra todos los pronósticos derrotar a América en la final del Torneo de Copa, también con marcador global de 3-2 (1-2 en el Azteca y 2-0 en el Universitario de Nuevo León. Los hombres que culminaron la hazaña fueron:
Enrique “Ojitos” Meza; Pedro Velazquez, Orlando Bandala, Roberto Rogel y Alejandro izquierdo; Héctor González, Washington Olivera y Raymundo Correa “Lola”, Tomás Boy, Gerónimo Barbadillo y Alfredo “Alacrán” Jiménez. De cambio entraron: Marcos Menéndez y Edmundo Manzotti
Su director técnico era el peruano Claudio Lostanau (quien fuera gran figura del Monterrey y el Toluca en los sesenta).
La temporada 76-77 fue desastrosa para los Tigres pues tuvieron que jugar la liguilla por el no descenso contra el Zacatepec -la cual a final de cuentas ganaron- por lo que pocos esperaban que apenas un año más tarde, bajo la dirección del gran entrenador uruguayo Carlos Miloc (antiguo goleador del Morelia y del Irapuato en los años cincuenta y sesenta), se hicieran del título de liga. Aquel equipo memorable, que despacho en la final a los Pumas al son de
2-0 y 1-1 (3-1, marcador global) estaba conformado por:
Mateo Bravo; Mario Carrillo (Sí, el famosísimo “Capello“) Osvaldo Batocletti, Raúl Ruiz Machuca y Alejandro Izquierdo; Roberto Gadea, José Luis ”Pillo” Herrera y Tomás Boy; Sergio Orduña, Walter Daniel Mantegazza y Gerónimo Barbadillo. De cambio entraron: Juan Ramón Ocampo y Ernesto Sánchez.
Cuatro años después, en 1982, tras haber perdido la final de la temporada 79-80 con Cruz Azul, Tigres nuevamente llegó a la instancia decisiva. Su rival en esta ocasión era el poderosísimo Atlante, que contaba con un plantel lleno de figuras nacionales e internacionales tales como: Ricardo Lavolpe, Eduardo Rergis Arturo Vásquez Ayala, Eduardo Moses, Evanivaldo Castro “Cabinho” y Rubén “El Ratón” Ayala.
Después de dos partidos disputados, quedaron empatados en el marcador global (2-1) y (1-0). Sin embargo, gracias a una gran actuación de Mateo Bravo en la portería, lograron sobreponerse en la serie de penaltis 3-1. Los Tigres, también dirigidos por Carlos Miloc alinearon los siguientes elementos: Mateo Bravo; José Sánchez, Osvaldo Batocletti, Roberto da Silva y Adrián Incapié; Salvador Carrillo Tomás Boy, Francisco Solís y Sergio Orduña; Gerónimo Barbadillo y Enrique Bastos. De cambio entraron Geraldo Goncálvez y Eduardo Valencia.
Muchos años pasaron para que Tigres volviera a obtener un título, ésta vez, igual que el primero, de Copa. Los jugadores que vistieron la playera felina en el juego decisivo contra Atlas (1-0), fueron los siguientes:
Robert Dante Siboldi; Alfredo Murguía, Marcos Ayala, Arnulfo Tinoco y Francisco Javier “Flaco” Gómez; Omar Arellano (padre del actual jugador de Chivas), Martín “Toqui” Castañeda, Marco Antonio “Chima” Ruiz y Tab Ramos (mundialista estadounidense); Javier “Pastor” Lozano (quien luego sería campeón con Morelia) y Sergio Almaguer (que después se haría defensa y jugaría después en Cruz Azul, Necaxa y el Galatasaray de Turquía). De cambio entraron: Humberto González, Martín Félix Ubaldi y José Manuel “El Chepo” de la Torre (Hoy entrenador de la selección).
Eran dirigidos por Victor Manuel Vucetich, y, pese a que ganaron la Copa, no pudieron evitar descender ese mismo año a la Primera División “A”.
Quince años después han vuelto a levantar un trofeo: ¡Enhorabuena campeones!
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