El Atlante acaba de cumplir
100 años y, aunque actualmente participa en la división de ascenso, está en
semifinales y es uno de los principales candidatos para subir al máximo
circuito, buen momento para recordar cuando obtuvo su segundo ascenso, en
90-91.
Un año antes, en 89-90, Los Potros de Hierro
habían caído a la Segunda División y, con un cuadro formado en su mayoría por
jóvenes que habían ascendido al Potros Neza en 88-89, buscaban volver a la
división mayor.
Al
final de las 38 jornadas de temporada regular, Atlante terminó en segunda
posición con 71 puntos, dos abajo del líder Zacatepec. Ya en la liguilla, logró
quedar como líder de su grupo, superando a la Universidad Autónoma de
Querétaro, al Tepic, al Tijuana y a los propios Cañeros. En la final se mediría
al Pachuca, que, tras 18 años en la categoría de plata, esperaba, también con
ansias, regresar a la Primera División.
El primer juego se jugó en el Estadio
Revolución de Pachuca. Tras un apretado encuentro, el marcador quedó empatado
2-2. La vuelta se jugó en el Estadio Azulgrana de la colonia Nápoles, pero
nuevamente la igualada se repitió, esta vez sin goles. El tercer encuentro, el
cual definiría la serie, se jugó el miércoles 17 de julio en el Estadio
Cuauhtémoc de Puebla, pero, al término de los 90 minutos y de los dos tiempos
adicionales de 15 minutos, el marcador no se movió. Hubo entonces necesidad de llegar
a los penales.
Tras la reglamentaria serie inicial, el
marcador se mantuvo igualado a cinco. Por Pachuca anotaron: Manuel Padilla,
Enrique Guzmán, Gerardo Quintero, Orlando Segura y Víctor Hugo Macedo. Por
Atlante: Sergio Rodríguez, Luis Miguel Salvador, Sergio Martínez, Raúl
Gutiérrez y Roberto Andrade.
Ya en muerte súbita, Bernardo Castañeda y
Antonio Gante anotaron sus respectivos penaltis. Félix Fernández detuvo el tiro
de Roberto Sandoval, pero César “Chispa” Suárez, también falló el suyo, con lo
que la serie continuó igualada. Enseguida, Ulises Coss y Ernesto Pérez
anotaron; Rolando Soto (portero tuzo) y Alfredo Delgado fallaron. A
continuación vino Alejandro Marbataín y falló, con lo que la responsabilidad de
lograr el ascenso recayó en el guardameta azulgrana Félix Fernández, quien con
un tiro fuerte, raso y colocado, le dio el triunfo al conjunto capitalino.
Estas fueron las alineaciones
de aquel memorable encuentro:
PACHUCA:
Carlos Corona; Alejandro
Marbataín, Juan Lino, Roberto Sandoval y Gerardo Quintero; Orlando Segura,
Víctor Hugo Macedo, Manuel Padilla y Ulises Coss; Manuel Calderón y Enrique
Guzmán. Luego entraron de cambio: Rolando Soto por Corona y Bernardo Castañeda
por Calderón.
ATLANTE:
Félix Fernández; Raúl “Potro”
Gutiérrez, Sergio Martínez, Alfredo Delgado y Antonio Gante; Ernesto Pérez,
César “Chispa” Suárez, Mario García y Roberto Andrade; Pablo Oseguera y Luis
Miguel Salvador. Luego entraron: Sergio Rodríguez por Oceguera y Rafael
Mancilla por García. El entrenador del campeón fue Luis Manuel Torres Salinas,
asesorado por Ricardo Antonio Lavolpe.
La Volpe no fue asesor en Segunda División para Atlante: Era el director técnico, pero como estaba prohibido que extranjeros dirigieran en esa división, lo hacía por debajo del agua, daba órdenes al "DT oficial" Gilberto Guzmán y como éste lo ignoró en un juego de la liguilla, José Antonio García lo despidió y puso a Luis Manuel Torres Salinas en el banquillo, y La Volpe fue el cerebro de aquel sufrido ascenso. Igual situación ocurría con la Universidad Autónoma de Querétaro, que era manejada tras bambalinas por Miguel Marín.
ResponderEliminarmanuel calderon y enrique guzman estuvieron en el ascenso de cobras de queretaro 5 años antes, donde le ganaron a pachuca que estaba perdiendo su segunda final de ascenso consecutiva
ResponderEliminar