Gran polémica ha desatado la última actuación de la Selección Mexicana, y en un caso muy particular, el portero del América, Francisco Guillermo Ochoa, ha sido duramente criticado por la prensa y una gran parte de la afición.
Por ahora prefiero no dar mi opinión acerca de éste, ya que sería dar continuidad a un suceso que es alimentado más por lo mediático que lo futbolístico. Y todo esto me lleva a recordar el hecho de que, históricamente, México ha sido cuna de grandes porteros, muchos de los cuales nunca alcanzaron la gloria que quizá merecían, pues la competencia por el puesto siempre ha sido muy dura y con muchos candidatos a ocupar el lugar que puede ser el más cruel dentro de la cancha.
Todo mundo tiene en la memoria o ha escuchado las hazañas de Antonio "La Tota" Carbajal, portero mexicano que ostenta -junto con el alemán Lotthar Matthäus- el récord de más copas del mundo jugadas, con un total de 5 Mundiales (Brasil 50, Suiza 54, Suecia 58, Chile 62 e Inglaterra 66). Pero pocos recuerdan nombres como Jaime "Tubo" Gómez, portero de las Chivas en la época del "campeonísimo", o Antonio "Piolín" Mota, portero del extinto Club Oro quien, con una atajada suya al mismo "Tubo" logró frenar en seco a la defensiva más poderosa de la época y evitó que el Club Deportivo Guadalajara ganara 5 títulos de forma consecutiva, y de paso llevó el trofeo de campeón de liga a las vitrinas de su equipo (el único que el Oro consiguió en su historia). Ellos y muchos más (Francisco Castrejón del América es otro que me viene a la mente) vieron como su talento quedó a la sombra de quien parecía sería el eterno guardamenta mexicano, y quien finalmente ocupó su lugar (Ignacio "Cuate" Calderón) se cuenta también que era más una decisión producto de la mercadotecnia -era el héroe y galán de moda de las foto-novelas de esa época- que por sus méritos y habilidades futbolísticas.
Izquierda: Antonio Carbajal, en sus tiempos de guardameta nacional. Arriba-derecha: Jaime "Tubo" Gómez, leyendo una historieta en pleno partido. Abajo-derecha: Ignacio Calderón estelarizando una foto-novela.
En los años noventa se vivió una situación similar, ya que el arribo y consagración de un portero llamado Jorge Campos hizo que muchos de sus contemporáneos se pasaran muchos años en la banca, esperando una oportunidad para poder mostrar sus cualidades (Alejandro "Gallo" García, Adolfo Ríos, Adrián Chávez, Nicolás Navarro y Félix Fernández, entre otros).
El "Brody", referente de México a nivel internacional, y por muchos años titular indiscutible bajo los 3 postes de la Selección.
Hoy en día la situación no es tan distinta. La gran calidad de los guardavallas mexicanos hace que la decisión de escoger a sólo 3 porteros para el representativo nacional sea ardua y de lugar a mucha discusión. Nombres van y nombres vienen, todos buscando cada jornada el dar lo mejor de sí para ser tomados en cuenta y, como se dice de manera coloquial, "llenarle el ojo" al Director técnico de la Selección. Se podría decir que actualmente la baraja la componen los siguientes cancerberos:
- José de Jesús Corona (Cruz Azul).
- Luis Ernesto Michel (Guadalajara)
- Francisco Guillermo Ochoa (América)
- Alfredo Talavera (Toluca)
- Jonathan Orozco (Monterrey)
- Cirilo Saucedo (Tigres)
- Oswaldo Sánchez (Santos Laguna).
Todos ellos porteros con calidad, virtudes propias y características que hacen pensar en que los méritos que tienen -o tendrían, en un momento dado- para vestir la camiseta verde son obvias. Sin embargo, creo que hay un portero al que no se le ha hecho justicia hace mucho tiempo, ya que a lo largo de su carrera ha demostrado calidad, sobriedad, trabajo arduo, constancia y que ha sido un referente y pieza fundamental en los equipos en los que ha jugado: Moisés Muñoz.
Moisés inició su carrera en Monarcas Morelia, equipo con el que debutó en 1999, y del que fuera portero titular durante 9 años, del 2001 al 2010. Se destacó desde sus inicios por su buen golpeo de balón, por su estilo sobrio para jugar, el buen recorrido de su área y por su gran capacidad para atajar penales; tiene también la capacidad de dar largos despejes, que muchas veces terminan siendo pases a gol. Durante su estancia en Monarcas Morelia fue incluso seleccionado nacional y ocupó por mucho tiempo el puesto de segundo portero, debajo de Oswaldo Sánchez, durante la época de Ricardo LaVolpe. Fue titular en la Copa Oro del 2005 y también fue convocado para la Copa Confederaciones del 2005. No llegó al mundial, pero su calidad como portero seguro y confiable no mermó en lo absoluto; tanto que aún fue convocado a la Selección tanto por Hugo Sánchez como por Sven-Goran Erikkson.
Dentro de su historial se encuentra un título de campeón con Monarcas Morelia en el Invierno 2000 (siendo el portero suplente), 2 participaciones en Copa Libertadores de América, 1 Copa Oro, 1 Copa confederaciones, eliminatorias rumbo al Mundial de Alemania 2006, entre otros torneos que ha disputado.
Actualmente juega para el Atlante F.C., y se ha convertido en uno de los elementos más destacados e importantes de la escuadra azulgrana, haciendo olvidar un poco a quien por mucho tiempo fue símbolo y líder de los Potros de Hierro, Federico Vilar. Sin embargo, la prensa especializada, los medios y la misma afición se han olvidado de él, y a pesar de su innegable calidad no ha sido convocado -ni siquiera contemplado- por la gente del Cuerpo Ténico del representativo nacional.
A manera personal me gustaría que se le diera una nueva oportunidad a este portero, quien ha demostrado ya con creces su capacidad. Ojalá que la lucha por el puesto en la portería contemple bien a todos los candidatos y a quienes merecen estar en la lucha. Al final del día, eso repercutirá en una especie de "efecto dominó", en el que todos se esforzarán por ser cada día mejores, y quien ganará con todo esto al final será la misma Selección. Si yo tuviera las riendas del equipo nacional, ¡créanme qué Moisés estaría en mi lista!